Un nuevo hogar




Al año, 100.000 perros son abandonados a su suerte en España. Para los más afortunados, las adopciones son su salvación,  pero lamentablemente solo es el 3%.
Si estás buscando simplemente un amigo, visita los refugios, encontrarás de todo, ya que a causa de la crisis,  los animales de raza tampoco se libran del abandono.
Hay animales preciosos, cachorros, viejecitos, tranquilos, aventureros, pero sobre todo fieles y cariñosos. Si has pensado en adoptar, adelante!

UNA SEGUNDA OPORTUNIDAD
Cuando encuentres a tu compañero y sepas que estáis echos el uno para el otro, debes de firmar una serie de documentos que te obliga y responsabiliza del perro. Si no lo aceptas no hay adopción.
Es lógico que quieran asegurarse que vaya a buenas manos, que le des un hogar y cuidados, y no lo regales ni sacrifiques o abandones. Si el perro muerte o se ha perdido, hay que notificarlo a la protectora.


En excepción de perros enfermos, se entregan totalmente sanos, con sus vacunas al día.
La adopción se termina aportando un donativo cubriendo los gastos médicos. (vacunas, esterilización y chip). Por supuesto el precio no tiene nada que ver con el precio que cuesta un perro de raza. 

AL LLEGAR A CASA
El perro debería ser uno más de la familia, y tendrá que sentirse en su hogar, que esté tranquilo y feliz.
Para que se encuentre bien desde el primer momento, deberás de elegir a un perro que se parezca a tí, sobre todo al estilo de vida que tú tengas.
Su raza, tamaño, carácter y edad, será fundamental.


Para que te hagas una idea, los cachorros necesitan muchos cuidados y atenciones y por supuesto una educación, como enseñarle donde hacer sus necesidades y a no morder cables ni zapatos, pero se adaptarán rápido a tus costumbres.
Un perro más adulto será más tranquilo y facilita algo más la convivencia.

PRIMER ENCUENTRO
Para que el cambio de residencia (albergue a un hogar) no le excite lo menos posible,  y pedir a los trabajadores del albergue que te acompañen a tu casa para que no se sienta desubicado. Necesitará un día entero para acostumbrarse a su nuevo hogar.


Lo ideal sería antes de entrar en casa, darle un largo paseo, llegará más tranquilo y crearás un vinculo con él. Él sabrá que tú serás su lider.
Una vez entre en casa, déjale libertad y muéstrale su cama y su comedero y bebedero. Búscale un sitio donde se pueda sentir cómodo. él también necesita su espacio.


Puede que el primer día tu perro esté más intranquilo, que coma y beba poco, que llore por las noches. Dale tiempo a que se acostumbre y se adapte. Dale cariño y sobre todo no te ofusques o le riñas.
Si es cachorro, deja junto a su camita, un reloj. Parecerá los latidos de su madre y se calmará.

PRIMERA PASEO
Elige un sitio seguro donde no pueda escapar o utiliza una correa extensible hasta que aprenda a atender tu llamada. Una vez se sienta seguro habrás ganado su lealtad, confianza y cariño para siempre.